El lectómetro es un recurso que se utiliza para llevar un registro de la cantidad de lecturas realizadas. En general tiene un dibujo, sin colorear, compuesto por libros apilados o ubicados en un estante. A medida que se leen libros se registra en el lectómetro pintando uno de los libros con lápices de colores. Este proceso se reitera con cada nuevo libro leído, permitiendo ver de manera tangible el progreso en la lectura.
Lectómetro ¿Individual o grupal?
El lectómetro puede ser completado de forma individual para registrar lecturas personales. Es una excelente manera de establecer metas personales de lectura, seguir el progreso y reflexionar sobre el desarrollo de habilidades lectoras a lo largo del tiempo. Por otro lado, es un recurso que puede ser incluido en un proyecto grupal a fin de cumplir con una cantidad objetiva de lecturas. Por tanto, es una herramienta versátil que se adapta tanto al trabajo individual como al grupal.
Gracias a su versatilidad, el lectómetro se adapta tanto al trabajo individual como al grupal, convirtiéndose en un gran aliado para incentivar la lectura en el aula.
Beneficios del lectometro
- Fomenta el hábito de lectura: Al visualizar el progreso, los chicos se motivan a seguir leyendo.
- Desarrolla la autonomía: Al usarlo de manera individual, cada estudiante se hace responsable de su propio registro de avance.
- Promueve el trabajo en equipo: Al usarlo de forma grupal genera un sentido de comunidad y desafío compartido.
Modelos de lectómetros
En el siguiente PDF compartimos distintos modelos de lectómetros listos para imprimir. ¡Descargalos gratis y empezá a usarlos en el aula!